domingo, 22 de febrero de 2015

LAS TICs EN LA EDUACIÓN

ESTIMADOS PARTICIPANTES DEL DIPLOMADO UNEFA PUERTO CABELLO, BIENVENIDOS. SE LES INVITA A COMPARTIR A TRAVÉS DE ESTE MEDIO SUS OPINIONES Y POSTURAS EN RELACIÓN A LA LECTURA PRESENTADA. ÉXITO Y GRACIAS POR SU APORTE.  
            Antes de entrar a analizar el uso las nuevas tecnología de la información y la comunicación (de ahora en adelante TICs) en la educación, debo dejar en claro que el presente artículo muestra una tendencia diferente a la de otros autores que en gran medida sólo ven dificultades y riesgos en la aplicación de dichas facilidades tecnológicas, tal es el caso de Gabelas (2002), cuando afirma que “nunca tantos han sido incomunicados por tan pocos” (p. 3).  Tener una visión apocalíptica de las consecuencias que pueda traer el uso de las TICs, a largo o mediano plazo, resulta tan contradictorio como afirmar que la masificación de la información con la invención de la imprenta y la posterior aparición de la prensa escrita, traería consecuencias negativas sobre el desarrollo de los individuos de una sociedad. Si bien es cierto que al proliferar las facilidades tecnológicas para difundir información, las mismas llegarán en primera instancia a las masas privilegiadas, eventualmente  las mismas se difundirán al resto de la población de menores recursos.

            Se corre el riesgo de ver en un principio, lo que en el futuro constituirá una herramienta de integración, como  otro medio para la alienación social. Esto problema se puede corregir en la medida en que los  lideres y gobernantes presten real importancia a la difusión de nuevas tecnologías y las hagan disponibles a aquellos que no las puedan acceder de otra forma.

            “Ya, en el año 2000, los conocimientos técnicos no son suficientes; se necesita también la capacidad de comunicarse eficazmente” (Campos, 2000, 12). Al extrapolar esta realidad a la acción formadora de los educadores sabemos que los mismos deberán estar preparados para manejar eficientemente los nuevos recursos tecnológicos disponibles para difundir la información a sus alumnos, también se deben concretar acciones tendentes a capacitar permanentemente a los profesionales de la educación de tal forma que se de respuesta al reto de lograr un docente moderno y adaptado a los nuevos tiempos en boga.
           
            Sin embargo este esfuerzo deberá estar acompañado de la asignación de recursos para la adquisición de nueva tecnología acorde a las necesidades del nivel de formación y su posterior uso.

            En otro orden de ideas se puede decir que existen algunos problemas estructurales como el uso indiscriminado de información por parte del alumnado. Sin embargo el verdadero problema no radica, según mi apreciación y experiencia, en que por medio de las TICs  se logre una mayor facilidad de acceso y difusión de la información a los alumnos, sino más bien en la reacción negativa que estos manifiestan hacia esta facilidad, de tal forma que la elaboración de las asignaciones no resguardan un nivel de dificultad mayor y todo se reduce a presentar la información oportunamente ante en docente. Para revertir este fenómeno se debe fomentar el hábito de convertir la información en conocimiento, esto quiere decir, se debe educar en función de la capacidad de análisis de la información obtenida y a partir de dicho análisis generar conocimiento.

            En este momento es que cobra realmente importancia el uso de la tecnología de la información, debido a que el tiempo que se debe invertir en acceder a los datos es menor y por ende se dispone de mayores recursos temporales para fomentar el análisis. Por otra parte, el ser humano le debe el desarrollo alcanzado en diferentes áreas a  la comunicación, pero la misma depende del medio utilizado, en la actualidad debemos aprender nuevamente a comunicarnos.

            Ahora bien como se mencionó anteriormente, la comunicación es una acción que depende del medio utilizado para hacerla. La misma se llevará a cabo con mayor o menor dificultad en función de los canales empleados para transmitir los datos desde el emisor hasta al receptor. “En nuestra sociedad actual hay una decadencia de la palabra de tal forma que estaríamos llegando o, incluso, cayendo en las garras de una civilización audiovisual” (ob. cit., p. 12). Esto bajo ningún aspecto resulta negativo desde el punto de vista docente, debido a que mientras se haga llegar con mayor efectividad el mensaje, los resultados que se pueden obtener serán, en esta misma medida, mejores.

            En tal sentido Villalonga (2005) plantea que:

Se da por sentado que los nuevos usos tecnológicos generan usos sociales positivos. En el hogar, en el comercio, la economía, la ciencia y la investigación, así como en la educación y la distribución del conocimiento, Internet se ha mostrado poderosa y plural. (p. 1)

            El docente de hoy debe estar en conocimiento que su función formadora no será protagonizada en ningún momento ni por el, ni por el programa de formación, sino por el aprendiz. En tal sentido debe transformar su metodología de trabajo para llegar a ser un mediador entre el cúmulo de información disponible, y el conocimiento que de la misma se pueda generar.

            Ahora bien ¿Qué impacto puede tener el uso de las TICs en el proceso de enseñanza? En el Informe Mundial sobre la Educación de la UNESCO presentado por Resta (2004), se describió el profundo impacto de las TICs en los métodos convencionales de enseñanza y de aprendizaje, augurando también la transformación del proceso de enseñanza-aprendizaje y la forma en que docentes y alumnos acceden al conocimiento y la información. (p. 5)

            La importancia de estas herramientas técnicas es tal que con seguridad en un corto tiempo, y como se prevee en el informe antes citado, las características del proceso de enseñanza experimentarán un cambio profundo en cuanto a su concepción y a los resultados obtenidos. A través del uso de equipos multimedia y facilidades audiovisuales se podrá extender el contenido programático, o a lo sumo se podrá ir a un nivel de asimilación mayor de los contenidos ya establecidos.  Por otra parte, se debe tener cuidado de que el alumno pueda transmitir sus ideas y más importante aún, que las mismas encuentren un canal para fluir hacia el resto de los participantes (incluido el facilitador), en esto también pueden apoyar las TICs, fomentando en el alumno la iniciativa, creatividad y confianza que permita dar por cumplido exitosamente su formación.

            Vale la pena preguntarse ¿para cuándo dejar la capacitación de los docentes en el uso de las TICs?, en tal sentido podemos citamos Aguirre (2005) en lo siguiente:
 
Un docente que no maneje las tecnologías de información y comunicación está en clara desventaja con relación a los alumnos. La tecnología avanza en la vida cotidiana más rápido que en las escuelas, inclusive en zonas alejadas y pobres con servicios básicos deficitarios. Desafortunadamente, la sociedad moderna no ha sido capaz de imprimir el mismo ritmo a los cambios que ocurren en la educación. (p. 9)

            Tomando como referencia la experiencia del que escribe, el uso de las TICs, en el proceso de formación ha significado un avance importante en cuanto a la capacidad de comprensión y asimilación del contenido programático de una asignatura y  en muchos casos se corre el riesgo de que estas herramientas tecnológicas desborden en su  capacidad formadora  al docente.
 
            Ahora bien, deben existir algunas señales o evidencias del impacto que ha tenido el uso de las TICs en el proceso de enseñanza; por medio de Robalino (2005) sabemos que “las lecturas de los adultos de izquierda a derecha y de arriba hacia abajo han sido sustituidas por lecturas diagonales, simultáneas, en varios planos y dimensiones” (p. 1), por lo que se deben plantear trabajos de investigación que determinen el efecto que las facilidades tecnológicas han tenido sobre el proceso de enseñanza y de que manera se pueden aprovechar mejor las mismas.

            Evaluando con mayor profundidad el perfil del docente en Venezuela, para crear los programas de implantación de TICs, debemos tomar en cuenta que los mismos sean atractivos a todos los perfiles, poniendo énfasis en: la captación del interés femenino, factores de edad, grado de instrucción y nivel socio-cultural; fundamentalmente porque cada grupo de personas  es diferente y vemos, como por ejemplo, “las diferencias entre varones y mujeres en los estilos de comunicación y en la construcción y presentación de la propia imagen marcan las preferencias en el uso de las diversas herramientas que ofrece esta red de comunicación” (Bonder, 2002,     p. 15).

             También se deben resaltar las ventajas que presenta para una parte de la población la existencia de facilidades técnicas que permitan llevar la información a distancia rompiendo con la limitación espacio-tiempo, representado por el aula de clases y las horas de instrucción académica, tal es el caso de la educación virtual, que no podrían existir si  las TICs.

            En líneas generales debemos estar concientes que “En el actual entorno telemático es necesario un conocimiento más elástico de la comunicación como flujo y un enfoque más creativo de la investigación en comunicación” (Sierra, 2004, p. 4 ), por tal motivo como condición previa a la incorporación y posterior aprovechamiento de los recursos tecnológicos de información se debe tener una mente abierta a la  modernidad y partidaria de los cambios que ella trae consigo.

BIBLIOGRAFÍA

AGUIRRE L. NOEL (2005), Formación Docente y las Tecnologías de Información y Comunicación. Publicado por la oficina Regional de Educación de la UNESCO para América Latina y el Caribe. Trabajo Presentado en el Seminario de la Innovación de la Informática Educativa ENLACES. Santiago, Chile.

BONDER GLORIA, (2002). Las Nuevas Tecnologías de Información y las Mujeres: Reflexiones Necesarias. Unidad Mujer y Desarrollo Proyecto CEPAL-GTZ “Institucionalización del Enfoque de Género en la                                     CEPAL y Ministerios Sectoriales”.Santiago de Chile. Fuente: http://www.eclac.cl/publicaciones/UnidadMujer/2/LCL1742/lcl1742e.pdf Consultado [01/04/2006]

CAMPOS ROSA (2000). La Comunicación Científica: ¿Arte o Técnica? Departamento de Química Orgánica y Farmacéutica, Facultad de Farmacia, Campus de Cartuja, Universidad de Granada, Granada. E-mail: jmcampos@platon.ugr.es

GABELAS B. JOSÉ, (2002). Las TIC en la Educación. Una Perspectiva Desmitificadora y Práctica sobre los Entornos de Aprendizaje Generados por las Nuevas Tecnologías. Departamento de Multimedia y Comunicación de la UOC. España. jgabelas@uoc.edu. Fuente: www.uoc.edu. Consultado: [10/04/2006]

RESTA PAUL (2004). Las Tecnologías de la Información y la Comunicación en la Formación Docente. Guía de Planificación en The University of Texas at Austin (EE.UU). Trabajo publicado por la División de Educación Superior de la  UNESCO.

ROBALINO C. MAGALY (2005). Formación Docente y TICs: Logros, Tensiones y Desafíos. Estudio de 17 Experiencias en América Latina. Ponencia Magistral Formación Docente y TICS. UNESCO. Chile. Fuente: http://www.enlaces.cl/archivos/doc/FORMACIONDOCENTEYTIC.pdf Consultado [10/04/2006]
  
SIERRA CABALERO (2004). Nuevas Tecnologías de la Información, Comunicación y Desarrollo. Universidad de Sevilla. Fuente: fsierra@us.es. Consultado: [10/04/2006]

VILLALONGA FERNANDO, (2003). "Innovación Tecnológica e Innovación Social: Aplicaciones Sociales de las TIC". En: Acto de graduación de los estudiantes de formación de postgrado de la promoción 2001-2002                                    de la UOC. Barcelona [conferencia en línea]. UOC. Fuente: http://www.educaciontecnologica.cl/documentos.htm  Consultado [10/04/2006]